TABURETE

Taburete

Este nombre está presente en mi cabeza, en mis conversaciones, en mis recomendaciones –y por supuesto en cualquier tipo de reproductor de música que pueda tener a mi alcance–, de forma permanente, desde hace unas semanas.

Sé que lleva de moda ya bastantes meses, pero yo les he empezado a prestar atención en serio hace relativamente poco tiempo (aparte del caso que les pude hacer la primera vez que les puse en el bar); y he de reconocer que me tienen súper pillado.
Les escucho una y otra vez… Una y otra vez… Una y otra vez… Por supuesto, sin conseguir aprenderme las letras aparte de frases sueltas, retales de estribillos, o versos inventados (es el precio que pago por cumplir años. Memoria tartamuda se llama).

Me he dado cuenta que me gustan porque lo que cuentan (y cantan) son situaciones que no me cuesta mucho imaginar siendo protagonista, y eso me encanta. Me gusta desarrollar las canciones y situarlas en un plano real, haciendo minipelículas con cada una de ellas.
Veo a mis amigos y a mí en Kaiserslautern. Saliendo del piano bar, con los amos. Sin duda cantaría a María Dolores y sus ojos de luna. Y aunque esa de morado ya no me dice nada, por supuesto no me canso de quererte en soledad…
¿Quién no tiene un amigo lingotín, cierra bares profesional (que incluso puede que seamos nosotros mismos, haced examen de conciencia), que acaba la noche yéndose siempre a casa de Dron, porque hay muchas jodas por vivir?

Son letras curiosas, acordes que ponen ritmo a dichas letras, y que hacen una mezcla completamente pegadiza y adictiva (para mí, por supuesto, que ya estoy viendo a muchos tirándose de los pelos, y poniendo en duda mi gusto y mi criterio musical por decir estas palabras).
Me parecen acertadas esas melodías rancheras con sus metales acompañando perfectamente. Todas las canciones a medio tiempo para cantarlas con el sentimiento más que con la voz, me encantan. Me alegra, tras esa moda de los últimos años en los que era complicado, volver a entender bien las letras en una voz potente, clara y ¡¡afinada!!
Y por supuesto me gusta el electrochotis con toques de new age … pero tranquilito!!

Así que espero poder verlos actuar en directo en breve. Y quien sabe si incluso acabar la noche con ellos, disfrutando de los amigos que nos incitan a una ronda más!!

Besos para ellas y un abrazo para los demás.
Se os quiere y lo sabéis.