Prado

AYER ALLÍ. HOY AQUÍ

AYER ALLÍ HOY AQUÍ

De todos, o casi todos, es sabido mi amor incondicional por Nueva York. Lo que tiene gracia es que no la conozco. Y es, como muchos otros, un amor platónico que me lleva a ensoñaciones mucho más allá de lo que casi seguro sería la realidad. Quizá algún día nos presenten, y pueda besar la mano de tan esplendorosa...