LA EDAD DE LA EXIGENCIA
"Me he vuelto intransigente como mi padre" me decía una amiga –de la que evitaremos dar el nombre para así no tenerles por intransigentes, ni a ella ni a su padre, dado que no lo son– hace un rato. A lo que yo le contestaba que probablemente no es que se haya vuelto intransigente, sino que simplemente...